sábado, 31 de agosto de 2013

Nostalgia. Palabras jugando a predecir el futuro.

Entre tanto escándalo en medio de aquella fiesta, pasadas ya las dos de la madrugada quise salir a tomar un respiro al balcón, necesitaba silencio, calma, sentía que de mis pulmones salia corriendo el aire; no soportaba la idea de que ella estuviera acá, después de tanto tiempo tenia que encontrármela, justo ahora... tropezar con ella y vernos a los ojos sin decir ni una palabra, desviar la mirada al tiempo que me disculpaba y alejándome rápidamente para perderme entre las alcoholizadas personas... no pude evitar buscarla con la mirada en resto de la fiesta sin lograr encontrarla... quizás ya se fue, quizás no soporta estar en un mismo lugar que yo. Una vista hermosa en este balcón, casi oscuro, todos están demasiado ocupados adentro bailando como para darse cuenta del paisaje que se aprecia desde acá, y la luna tan gigante y hermosa, justo como su mirada...

— Hola.

Mi corazón casi explota al ver de quien se trataba... como si la hubiese invocado ella estaba a mi lado, me había concentrado demasiado observando a la luna y pensando en ella como para darme cuenta de que alguien se acercaba...

 Hola... Mucho ruido allá dentro ¿no?
— Si... se necesita algo de paz.
— ¿Que me cuentas vale? siglos sin vernos. La ultima vez fue cuando te encontré en la cama con este... ¿Como se llamaba? ¿Tim Macgraw? no recuerdo.
 ¡Ah, si! o tal vez fue con Samuel.... ¿Alejandro? Bueno... alguno de ellos.
— Si... uno de esos, pero bueno, fue divertido ver como ese Samuel o Alejandro o Tim se perdían saltando por la ventana ¡creyendo que yo era tu esposo!
— Puff... Si. ¿Quien lo diría?
— Si, solo regresaba por el libro que te había prestado, no se que le paso por la mente a ese tipo... bueno, pasado pisado. ¿Que es de tu vida princesa?
 Aquí casual, tomando una copa de vino y pasando el rato con mi araña.
— ¡Genial Hally sigue viva! ¿que tipo de vino tomas?
 Vino blanco, del 68.
 Prefiero el Tinto, tiene mas esencia en su sabor.
 ¿Y que ha sido de tu vida?
 ¿La mía?Bueno, totalmente casual. Metiendo unos cuantos ajustes a mi maquina del tiempo para regresar a esa época donde tus labios solo me pertenecían a mi... Pero no me prestes mucha atención, cuando la arregle olvidaras esta conversación... cuéntame, ¿tienes hijos?
— ¡Ni loca! esos demonios nunca me dejarían tener relaciones en paz, ya sabes como son. 
— Si hahaha, te entiendo, es horrible el hecho de estar practicando la posición mas difícil del Kamasutra y que ellos entren sin previo aviso...
— Si, mocosos entrometidos.

Me encantaba tanto escucharla reír con estas conversaciones tan bizarras y sin sentido alguno. Me pregunto si aquello de querer volver a sus besos habrá pasado por debajo, no le presto atención.   El alcohol me esta haciendo decir estupideces...


 Ya lo creo...

 Me sorprende que aun quieras besarme, en el pasado te aburriste de mi. 
— Nunca deje de querer besarte, no sabes cuantas veces visite el infierno al verte con alguien mas, sonriendo. Según mis recuerdos tu fuiste la que se aburrió de mi y se fue.
 Tal vez tus recuerdos no son lo que parecen ser, ¿no lo crees?
 A lo mejor, pero quizás tus recuerdos no sean como lo crees en realidad...Yo recuerdo ese ultimo beso que nunca sucedió y tu marchándote sin explicación alguna.
 Recuerdas... Hmm... Déjame decirte que los sueños también pasan a ser parte de un recuerdo, así que dime ¿Recuerdo o sueño?
 Los sueños se transforman en fragmentos olvidados mas rápido que los recuerdos, por eso dudo que después de tanto tiempo el dolor de un sueño siga como el primer día en mi.
 Hmm... buena respuesta.
— Dime lo que tu recuerdas al respecto....
— Si de recuerdos se trata todo esto... Recuerdo haber tenido una apasionante noche contigo en mi departamento, sudados y llenos de placer, convencidos de que nos amábamos el uno al otro y completamente seguros de que no terminaría nunca. La noche fue testigo del ultimo "te amo" que susurraste en mi oído antes de irte. 
 Si... recuerdo esa noche a la perfección, pero no logro recordar mi partida, solo pasa por mi mente estar sumergidos en esa pasión que dictaba un amor eterno, mi amor eterno, ese que yo deseaba junto a ti, que te gritaba a besos, a caricias, con la mirada; ese que se esfumo al ver que no estabas al amanecer...  No logro recordar mi partida, pero recuerdo la tuya, recuerdo escuchar ese "adiós" que nunca salio de tus labios. 
 Esto es muy confuso, no logro entender nada de lo que paso esa noche. Solo quisiera verte de nuevo de esa manera y dejar mi vida de porquería para estar contigo.
 Deseo eso, apartarte de tu vida para que te unas a la mía, tal vez suene algo egoísta pero... quiero que estés conmigo donde los únicos problemas sean por ver quien se ducha primero... o  juntos. Regresar al pasado, para eso es mi maquina del tiempo, para volver a esa noche y evitar que pase lo que sea que paso... pronto estará lista.
 Así sera, espero que en el pasado no se repita lo mismo. No se porque razón lo hiciste o lo hice, pero no me gusto para nada perderte.
— No nos gusto para nada perdernos... ¿Que te parece olvidar volver ese pasado, tomarlo como un fragmento inolvidable y estar juntos ahora?
 He pasado por muchas cosas desagradables desde que te perdí, cosas que realmente quiero olvidar, por eso volver al pasado me agradaría mucho; Ademas ahora no es lo mismo, deseo sentir lo mismo que sentí esa noche cuando estuve contigo por ultima vez.
 De acuerdo, si quieres olvidar todo lo que haz vivido hasta ahora, así sera. Yo también quiero volver a esa noche para corregir lo que sucedió... regresar a ti y a la eterna ilusión que me hacían vivir tus besos.
 Te pido que hagas todo lo posible.
— Haré lo que este en mis manos y mas... cualquier cosa por volverte a ver feliz, a verte sonreír a mi lado.
 Haz lo que tengas que hacer, quiero estar contigo para siempre.
— ¿Sabes?, he pensado que un para siempre ya es un cliché, pero ¿que te parece si lo intentamos todos los días? Deseando que no se acabe, deseando un para siempre, intentándolo todos los días.
 Realmente eso es lo que quiero.
 Es lo que debemos querer. Ángel... Jamas he dejare de anhelarte, por ahora tengo que irme, mientras mas rápido regrese a ti, mejor y acá metido no lograre nada.
 Haz que regrese a nosotros aquellas sonrisas, y llámame antes de hacerlo ¿Si? 
— Así sea solo para decirte que te amo y colgar lo haré...

Quien sabe cuantas copas de vino nos habremos tomado ese día, para decir aquellas cosas...

viernes, 23 de agosto de 2013

Sleep.

A través del olvido termino caminando, con una mirada llena de nostalgia y anhelo hacia algo que hace bastante tiempo que decidió partir, dejando a ese cuerpo totalmente vacío e inhabitable, ahí la razón por la cual todo lo que había en el y alguna vez sintió se fue consigo, justo detrás, cerca y sin perderle de vista.

Hubo momentos en los que el insomnio habito sus madrugadas, en las que no sabia en que gastar los segundos para dejar de pensar, de extrañar, de imaginar cuan dulce seria todo al dejar de respirar. Persiguiendo el olor del tiempo, entre libros se intentaba sumergir, música, arte; mil maneras diferentes de huir del infierno a el cual su mente no lo dejaba de someter pero, aun así, al final terminaba entre los brazos de la muerte, recordando el trazo que hacían esas caricias que ahora no son mas que grietas en su cuerpo... 

Insoportables voces en su mente, no dejaban de atormentarlo, repitiendo cada recuerdo una y otra y otra... "¡Basta!"  no dejaba de repetirle a los inaguantables susurros . Huye de sus propios demonios, pero sabia que no podía huir de algo que habitaba dentro de el...


"¡Oh, mira! morfina, venga déjate de bromas y tomate un par"... con eso caería en un humilde y largo sueño, pero imaginando que al cerrar los ojos lo primero que vería seria imagen, un recuerdo mas de su hermosa y casi celestial mirada. Adictiva, como el café. Oscura, como la noche. Eterna, como ella sola.  


De repente se dio cuenta de que quería volver a caer en esa mirada, sin importar como, simplemente ver y no perderse de ella ni un segundo mas. Entre sueños la encontraría, aquella a quien tanto anhela... decide por mas de un par, persiguiendo a su amada, tomando su mano en una eterna fantasía...


Duerme, hazlo por siempre, esperando su amor...

sábado, 6 de julio de 2013

Idiot

Simplemente se quedo ahí, de rodillas y exhausto de tanto haber intentado. Postrado en un lugar repleto de dolor y agonía, hasta que su corazón dejara de latir.

Miraba hacia abajo, con la cabeza gacha, dudando entre gritar, llorar, reírse de el mismo o morir. Quería seguirla, seguir gritando su nombre hasta que se dignara a mirar hacia atrás y ver que el estaba ahí, siguiéndola a donde fuera, porque le importaba, porque anhelaba estar a su lado, por que la amaba y no quería dejarla ir; pero estaba exhausto, no podía dar un paso mas y ella se estaba alejando cada vez mas. Aun gritaba su nombre, con toda la fuerza que su garganta y sus pulmones le permitieran, grito hasta quedarse sin voz, derramando lagrimas de molestia... molestia hacia el mismo por no se lo suficientemente bueno para mantenerla a su lado, molestia por no tener las suficientes fuerzas por luchar por ella hasta que se diera cuenta cuento la amaba, molestia hacia ella por no percatarse que lucho por seguirla hasta quedarse desgastado.

Estaba ahí, de rodillas viendo como su razón de vida se alejaba junto con su alma, como todo lo que fue y estaba dispuesto a ser se iba, sintiendo como su corazón dejaba de latir, poco a poco, y el incapaz de poder hacer algo, porque ya lo había hecho todo, ya no podía hacer nada, su cuerpo estaba desgastado, ya fuerzas no le quedaban.

Seguía esperándola, esperanzado que por su mente pasara en algún momento su nombre y estuviera dispuesta a volver, seguía esperando ver su hermoso rostro una vez mas, su profunda y eterna mirada, quería oír su melódica y encantadora voz... seguía de rodillas sin apartar la vista del camino que ella había tomado, extrañándola, anhelando su regreso, seguía en el mismo lugar, amándola como si jamas se hubiera marchado, dedicándole todo lo que le quedaba como un completo idiota porque de alguna manera, el  sabia que ella no iba a volver, pero se juro esperarla hasta que su corazón dejara de latir. 

sábado, 29 de junio de 2013

Soul

De vez en cuando caminaba sin mirar a donde iba y es que, ¿para que preocuparme a donde ir? todo aquello que esperaba encontrar al final de un camino conocido opto por desaparecer de una buena vez. A veces me pregunto que tendrán en la mente las personas en cada paso... sus preocupaciones económicas y materialistas, mentes vacías e inconformes con lo que tienen porque siempre terminaran queriendo mas. ¿Por que caminan con avidez hacia un lugar repleto de mas problemas? Esta claro que hay enfrentarse a todos los problemas que se te presentan en la vida pero, por mi parte, creo que la persona que dijo eso por primera vez no se quiso referir específicamente a tu vida común y cotidiana

¿Habéis sentido una vez la nada? Quizás nadie lo haya echo hasta ahora, siempre terminan sintiendo algo por mucho que deseen no hacerlo. Desespero. Dolor. Odio.
¿Que tan difícil puede resultar apagar tu humanidad? eso seria quedarte sin alma...

¿Alguna vez se han sentido sin alma? sin sentir nada, sin pensar en nada, sin que te importe absolutamente nada ni nadie, que los recuerdos no sean armas mortales y la nostalgia no sea mas que una simple palabra. Suena bien ¿Verdad? pues así termino mi cuerpo. Sin alma.

miércoles, 5 de junio de 2013

Entre Miradas y Sonrisas. Capitulo 3.

La verdad es que recuerdo vagamente ese momento, ese primer beso… Odio que los recuerdos se vayan con el paso del tiempo, pero en mi caso ese “tiempo” suele ser mucho más corto que el de los demás. El psiquiatra que solía visitar hacer años había dicho que lo que tenía podía resultar ser un tipo de mecanismo de defensa que creo mi mente luego de aquel accidente (del cual no tengo ningún recuerdo en mí pero, al pensar en ello todos los músculos de mi cuerpo se tensan y me paralizan con una intensidad indescriptible) antes de que desapareciera sin dejar rastro… el tipo parecía estar más loco que todos sus pacientes juntos, me caía realmente bien, apartando el hecho de que me obligaba a tomar pastillas tranquilizantes para evitar los “ataques de ansiedad oprimida” que tengo al recordar la nada, esa laguna que hay en mi mente… ¿Qué estaba diciendo? ¡Ah! Claro, aquel beso –suspira- no recuerdo casi nada de eso porque el rostro que portaba esos exquisitos labios simplemente desapareció de mi mente junto con todo lo que sentí o pensé al besarla… ¿Cuánto tiempo iba a pasar hasta que regresaran esos recuerdos a mi mente? ¿Qué había pasado después de besarla tan atrevidamente? Mis mejillas no me duelen así que no he recibido ninguna bofetada; al despertar mi mente no pasa de querer borrar todo aquello que yace recientemente en mi memoria, y lo logra, solo que el efecto no es permanente pero… al pasar los días, últimamente se ha…

  —  ¡Hey, Danny!  ¿Ya despertaste? SI NO, VOY A SUBIR A CUBRIRTE CON AGUA ¿EH?

La irritada voz llegaba desde el balcón, pero sonaba lejana, me dirigí para ver quién era, aun me sentía un poco aturdido y tenía un sabor metálico en la garganta… no lograba recordar absolutamente nada, ¿Cuánto más iba a tardar? Al verme, al principio aquel hombre frunció el ceño pero cuando vio mi confusión su expresión paso a ser más… piadosa.

   ¡Subiré, está pendiente de la puerta!

Luego, antes de encaminarse a la entrada del pequeño edificio, me pareció que murmuraba “Me has olvidado de nuevo ¿eh?”, resulto un gesto sumamente triste. En un instante estaba llamando en la puerta, no sé porque razón abrí sin conocerlo, pero su presencia me inspiraba mucha confianza.

     Esto… Hola, ¿Cómo se encuentra tu mente hoy?
     ¿Mi mente?... muy confundida y relativamente vacía ¿Quién eres?
     Idiota, me molesta que olvides al tipo que te ha salvado el trasero tantas veces.
     Lo siento… pero de verdad no logro recordar nada sobre ti.
     ¿Cuál es el último recuerdo que tienes?

Hasta ese momento no me había puesto a ver dentro de mi mente buscando un recuerdo estable, solo se repetía aquella borrosa imagen, besando a un rostro irreconocible.

     Estoy saliendo de un hospital, de noche… algo mareado.
     Eso fue ya hace ocho años, aun no nos conocíamos así que… por los momentos, me  llamo Alexander y es un placer volver a conocerte idiota. Ah ¡mira la hora! comprendo que lo hayas olvidado casi todo pero, no podemos perder más tiempo tenemos que ir a trabajar así que anda y vístete, en el transcurso del día recordaras todo de nuevo, como siempre…

Su voz se apagó en la última palabra, como si ocultara mil secretos tras ella. ¿Qué podía saber aquel hombre sobre lo que me pasaba? ¿Cómo sabia tanto de mí? No me preocupe mucho en el asunto… de antemano sabía que todo vendría a mi mente de un momento a otro, pero no podía dejar de pensar en aquel beso… no podía dejar de preguntarme quien era esa persona.


Al salir de la editorial, en la tarde,  Alexander me explico todo lo que había dicho aquella irritante y obstinada persona que nos gritaba dándonos órdenes, como si fuéramos esclavos. Pregunto acerca de mi memoria, le dije que aun nada estaba claro pero poco a poco recordaba los ratos infernales que pasaba en esa editorial junto a él que, de una manera extraña, me resultaban sumamente graciosos.

     Ese tipo le falta que le den en la cama, se nota que al pobre lo rechazan cada diez minutos y no las culpo, el tipo es un ogro color carne.


Me despedí de él y entre a mi apartamento, dijo que no saliera hasta que recordara lo suficiente para salir y no perderme en el intento de ir por pan o alguna estupidez como aquella. Me fui a la cama a eso de las 10 de la noche, leyendo “Orgullo y Prejuicio” para conciliar el sueño.

En una hora ya estaba inconsciente… en mis sueños no dejaba de repetirse un nombre… “Violet, Violet, Violet, Violet…” un susurro incesable me rodeaba y la verdad,  no me quejaba... amaba ese nombre.

lunes, 20 de mayo de 2013

Entre Miradas y Sonrisas. Capitulo 2.

Cada segundo de cada minuto de cada hora de cada día que faltaban para volver a verla se volvieron una indescriptible tortura, ¿la razón? aun estoy tratando de encontrarla. Realmente no entiendo como pudo hacer que volviera a pensar de esta manera, a sentir de esta manera. Se supone que estaba muerto, se supone que no volvería a sentir jamas, se supone que este tipo de pensamientos, de avidez, de miedo a hacer algo mal habían desaparecido junto con mi alma; ¿Como puede un cuerpo sin alma sentir este tipo de cosas, pensar de esta manera? Estoy seguro de que no soy mas que un recipiente de huesos, ¿De donde sale todo esto? Es como revivir a alguien, desafiar a la muerte a un nivel completamente mayor y eso no es posible, no puede hacer aparecer todo eso que yace destruido en alguna parte del infierno ¿O si?


Desde que la vi, aquel lunes que prometía ser como todos los demás, común, tedioso y largo hasta que tropecé con ella y paso a ser de todo eso a simplemente largo, desde aquel día estoy esperando con ansias el día de mañana, esta semana definitivamente me pareció eterna, a diario me preguntaba si ella siquiera recordaba a aquel atrevido desconocido que la invito a tomar una taza de café. Ahora no estaba seguro de llamarla, ¿Y si parecía desesperado? .... ¿Que me esta pasando? ya no pensare mas en el asunto, dormiré y olvidare su existencia para relajarme un poco.

Claro, intente dormir pero lo único que hacia era crear una y otra vez las miles de posibilidades que habrían el día de mañana, si aceptaba tomar un café conmigo era porque en ella había un algo de interés  ¿no es así? termine quedando inconsciente a las 3:00 am creando mil fantasías de lo que podría pasar...



Desperté algo ausente a la realidad, suele pasar así que estoy acostumbrado a olvidar donde estoy e incluso en ocasiones hasta mi vida entera... Suele suceder, nadie lo sabe, pero sucede. Mis mañana siempre son así. 

Al salir y sentarme en mi balcón con mi típica taza de te, mire de nuevo la tarjeta con el numero de Violet, vacilando tome mi celular y comencé a marcar. Al oír el segundo tono contesto, el aire dejo mis pulmones al escuchar su voz de nuevo.

¿Hola? ¿Hay alguien ahí?
Hola Violet. Buenos días, no se si me recuerdes, soy el chico que hizo que terminaras en el suelo
¡TU! Claro que te recuerdo, de hecho te tome una foto y te coloque en mi pared para tirarte dardos por haberme mandado a volar... ¿Sabes algo curioso? no recuerdo haber escuchado tu nombre.
Hahaha, eso es espeluznante. Con respecto a mi nombre, nunca lo dije.
— Bueno, ¿Que esperas? No soy adivina.

No podía evitar sonreír al hablar con ella, al oír su voz o imaginar las expresiones que ponía al hablar de esa manera tan teatral y divertida, simplemente no lo podía evitar y eso me producía mas avidez, quería verla ya, así que le dije:

¿Que tal si te digo mi nombre cuando nos veamos? Recuerda que te debo un café por la caída.
— Claro, claro ¿Como olvidar eso? A ver, dime donde nos veremos...

Le dije que nos encontráramos en el lugar del accidente a lo cual acepto algo divertida diciendo: "Volviendo a la escena del crimen ¿eh?" y al pasar media hora llegue primero, no pasaron mas de cinco minutos cuando la vi doblando en la esquina, al verme agito los brazos saludando, ¿Siempre estaba tan llena de energía? Me encantaba, no sabia porque y eso ya me estaba empezando a molestar, quería saber que había en ella que me hiciera sentir de esta manera y quería saberlo ya, al acercarse  antes de que siquiera saliera una palabra de esa dulce y rosa boca, la bese...




















viernes, 17 de mayo de 2013

Entre Miradas y Sonrisas. Capitulo 1.

Cuando la vi por primera vez, simplemente me pareció increíblemente hermosa, era como si alguien leyera mi mente, buscara como era mi "Chica perfecta" y la pusiera en frente de mi, con esa piel tan blanca como la luna, ese rostro angelical, esas pequeñas y adorables mejillas, esa sonrisa tan tímida y atrevida a la vez, esos labios, se veían tan suaves y perfectos con ese rosa claro... juraría que me estaban llamando, su cabello tan perfecto portando ese castaño oscuro, con ondas tan suaves que me incitaban acariciarlo, recorrer cada centímetro de el, resaltando su mirada... esa mirada... ¡Dios, su mirada! no podía salir de esa mirada, tenia tanto en ella, me encantaba ese color avellana oscuro, era como si me atrajeran mas y mas, dirigiéndome a un vacío sin fin, lleno de tanto dolor y tanta felicidad que no sabia que sentir, tantos recuerdos, tanta nostalgia, secretos, lagrimas... esa mirada me atrapo, jamas pude salir de ella cuando me la tope por primera vez, en ese accidental tropiezo que nos dimos por distraídos en medio de la calle, dejándonos a ambos en el suelo...        



— ¡Oh, cuanto lo siento! que distraída soy, debí de fijarme por donde caminaba.
— La culpa fue mía, yo era el que debía... — No pude seguir hablando cuando te vi, fue como si me arrancaras las palabras con tu belleza.
— Ehmm.... ¿Esta todo bien? ¡No me digas que te lastime! discúlpame de verdad.
— No te preocupes, estoy bien - logre decir, me sorprendió encontrar mi voz.- ¿Tu no te lastimaste verdad? Que distraído soy, debí fijarme por donde caminaba.
— ¡Hey! no me estarás imitando ¿verdad? esas son exactamente mis lineas ¡Hahahaha! te estoy vigilando.

En el momento que te escuche reír, me perdí de nuevo en tu belleza, miradote, sonreí, yo no era así, normalmente ignoraba a todo el mundo, jamas me habían hecho pensar de esta manera, jamas había conocido a nadie que me hiciera desear vivir eternamente solo para admirarla en cada segundo de esa eternidad. Me quise arriesgar.

 — ¡Claro que no! hahaha, lo que intento decir es que me gustaría compensarte la caída ¿Puedo invitarte a tomar algo? Conozco un increíble café a unas calles de aquí, si gustas.

Me miraste con el ceño fruncido, algo sorprendida por la invitación, luego sonreíste y miraste la carpeta que llevabas en las manos.

 — No sabes cuanto me gustaría aceptar, pero estoy corriendo por la ciudad entregando papeles, sino mi jefa me estrangulara pero, si aun quieres, podemos dejarlo para otro día, cuando no este corriendo por mi vida. Ten mi numero, llámame el viernes si aun quieres invitarme a tomar ese café.

Sonreíste y me diste una pequeña tarjeta con tu numero grabada en ella y seguiste a paso apresurado tu congestionado camino, volví a mirar la tarjeta buscando tu nombre, "Violet Daughter" un nombre hermoso,  se adaptada a ti. Me di de cuenta que no te había dicho mi nombre, pero ya te había perdido de vista.



Esa noche no pude hacer otra cosa que pensar en ella, recordar cada facción de su cuerpo, su voz, su sonrisa... No podía esperar a que cayera Viernes para poder verla otra vez y descubrir como demonios logro que volviera a sentir...

Su nombre se repitió en mis sueños una y otra vez...




jueves, 18 de abril de 2013

Pelirroja. Capitulo 1.


Corría el año de mi 1959, en la ciudad de San Francisco. Una ciudad muy emprendedora para su época. El calor azotaba a la ciudad, pero ese día muchas cosas  pasarían muchas  en la vida de Travis Ridge Jr. Nacido en San Diego, se había mudado a los 19 años a San Francisco. Su pasado es simple.  Salió de la secundaria por problemas emocionales. Antes de salir, Adam, su mejor amigo, le recordó que la vida hay que vivirla no solo, sino compartiéndola con aquellos que mas se quiere. Ese día Travis partiría a San José. El Creyó que sus problemas quedarían saldados pero no fue así.
Se dirigió a la estación de trenes de San Francisco, llevaba su traje marrón con  su corbata a cuadros. Sus 29 años no hacían efecto en la vejez de su cara. Alto de cabello negro, peculiar pero de gran animo. Al llegar le dijo con voz grave al vendedor:

-          -  ¡He! Amigo, un ticket para San José
-         -   ¿Y usted quien se cree?
-   - No me creo nada… Mi Nombre es Travis ridge, gerente de Industrias Mc Connors. Futuro        gobernador de San Francisco.
-         -  ¿Ahh? ¡Que yo sepa aun no es nada, así que mas respeto señor!

Tomó su ticket furioso y se dirigió inmediatamente al vagón del tren. A primera vista notó muy adelante su muy querido tío Andy Mc Connors, un viejo regordete de algunos 74 años de edad. Se dirigía a Los Ángeles para inaugurar su nueva franquicia de Café. Todos en San Francisco conocían Coffé & Cookies, una pequeña porción de las Industrias Mc Connors.


Se sentaron a hablar por un largo rato, mientras el tren arrancaba de la estación. Cuando muy rápido subió al vagón una pelirroja, delgada, de piel clara, ojos castaños y de cara muy suave. A simple vista cualquiera diría que es la chica de sus sueños, pero años atrás Travis se había enamorado perdidamente de ella. Su Nombre, Mary Banks, de un año menor a él, tuvo una gran amistad con Travis, hasta que llego ese día.
Enseguida se sentó unos puestos mas adelante. Travis la observaba mientras Andy seguía hablando de cuando apenas era un granjero en Wisconsin. Mark se levantó y con un nudo en la garganta se dirigía hacia ella. Pero algo se lo impido y se devolvió a su asiento. Enseguida una voz conocida le ordenó.

 - ¿Qué demonios haces sentado?

Enseguida Travis se levantó, al verle el rostro, era Adam, que venía en el mismo tren. Se alegró al verlo por que días antes, Adam le había dicho que iba a viajar a Venecia, a construir un puente para el gobernador, Giarberto Di Carlo.

-          -  ¿Qué? ¿Qué? ¿Haces aquí?
-         -   Te dije que no te dejaría con tus problemas.
-         -   ¿Pero, tu trabajo, lo perderás?
-         -   Eso puede esperar Travis. Ahora ve y habla con ella.
-         -   Pero ¿Qué se supone que le diré? Cada vez que me encuentro con su mirada me quedo sin habla.
-        - Tan solo ve amigo, sonríe y salúdala. Apuesto que al pasar tanto tiempo se sorprenderá de verte,     ¡anda! antes que el rubio de la barra ataque antes, la está viendo mucho.

Eso fue más que suficiente para hacer que Travis reaccionara. Levantándose, con las manos ligeramente sudadas se encamino hacia la mesa de Mary con una nerviosa sonrisa.

-         -   Ho…Hola Mary, ¿Me recuerdas?
-         -   Oh mi dios, ¿Travis? –Pregunto con un brillo en la mirada-

miércoles, 17 de abril de 2013

Anhelos...

Envuelta por la oscuridad de su alcoba lloraba a mares, aferrándose a su cama, tratando de apaciguar el dolor que la destruía, gritaba a su almohada, gritaba al techo... simplemente gritaba mientras se rasgaba el pecho tratando de extraer ese corazón que en cada latido dejaba de bombear sangre, sustituyéndola con un puro e insoportable dolor, por sus mejillas parecía derretirse su mirada y ella no dejaba de preguntarse "¿Como puede haber lagrimas luego de tantas vidas derramandolas sin parar?" Lo único que anhelaba era dejar de sentir, de pensar, de agrietarse mas y mas con cada latido... quería ser envuelta por la muerte, por un sueño que no tenga fin, simplemente quería dejar de depender del aíre y morir... lo quería y así iba a pasar, ella se encargaría de eso.