sábado, 6 de julio de 2013

Idiot

Simplemente se quedo ahí, de rodillas y exhausto de tanto haber intentado. Postrado en un lugar repleto de dolor y agonía, hasta que su corazón dejara de latir.

Miraba hacia abajo, con la cabeza gacha, dudando entre gritar, llorar, reírse de el mismo o morir. Quería seguirla, seguir gritando su nombre hasta que se dignara a mirar hacia atrás y ver que el estaba ahí, siguiéndola a donde fuera, porque le importaba, porque anhelaba estar a su lado, por que la amaba y no quería dejarla ir; pero estaba exhausto, no podía dar un paso mas y ella se estaba alejando cada vez mas. Aun gritaba su nombre, con toda la fuerza que su garganta y sus pulmones le permitieran, grito hasta quedarse sin voz, derramando lagrimas de molestia... molestia hacia el mismo por no se lo suficientemente bueno para mantenerla a su lado, molestia por no tener las suficientes fuerzas por luchar por ella hasta que se diera cuenta cuento la amaba, molestia hacia ella por no percatarse que lucho por seguirla hasta quedarse desgastado.

Estaba ahí, de rodillas viendo como su razón de vida se alejaba junto con su alma, como todo lo que fue y estaba dispuesto a ser se iba, sintiendo como su corazón dejaba de latir, poco a poco, y el incapaz de poder hacer algo, porque ya lo había hecho todo, ya no podía hacer nada, su cuerpo estaba desgastado, ya fuerzas no le quedaban.

Seguía esperándola, esperanzado que por su mente pasara en algún momento su nombre y estuviera dispuesta a volver, seguía esperando ver su hermoso rostro una vez mas, su profunda y eterna mirada, quería oír su melódica y encantadora voz... seguía de rodillas sin apartar la vista del camino que ella había tomado, extrañándola, anhelando su regreso, seguía en el mismo lugar, amándola como si jamas se hubiera marchado, dedicándole todo lo que le quedaba como un completo idiota porque de alguna manera, el  sabia que ella no iba a volver, pero se juro esperarla hasta que su corazón dejara de latir.